Anhelos

¿Por qué no me miráis cuando mis ojos
con visible ansiedad buscan los vuestros?...
¿Por qué no me miráis cuando tan sólo
es eso lo que imploro y lo que quiero?...

Yo no os pido, señora,
que déis a mis delirios vuestros besos
ni que abráis vuestros brazos tentadores
al fuego abrasador de mis deseos.
No os pido que tendáis a mis amores
la nocturnal escala de romeo,
ni me dejéis soñar el paraíso,
reclinado al calor de vuestros seno…
Os pido solamente,
cuando yo paso junto a vos, por veros,
que me miréis, señora, hasta quemarme
con el fulgor de vuestros ojos negros!...

0 comentarios:

Publicar un comentario